El teletrabajo, que parecía haber tocado techo durante la pandemia, vuelve a ganar terreno en España. Según los últimos datos, 3,2 millones de personas han trabajado desde casa en 2024, ya sea de forma ocasional o habitual.
Aunque la cifra sigue lejos de los niveles de 2020 y 2021, lo cierto es que el teletrabajo ha encontrado su hueco en muchas empresas y profesiones. Pero, ¿qué significa esta recuperación y qué podemos esperar en el futuro?
El teletrabajo gana fuerza, pero con matices
En España, el teletrabajo nunca ha estado tan implantado como en otros países europeos, pero sí ha habido avances. Actualmente, un 6,2% de los trabajadores lo hacen desde casa más de la mitad de los días, mientras que otro 7,1% teletrabaja ocasionalmente.
¿Qué significa esto? Básicamente, que el modelo híbrido es el que está triunfando. La mayoría de las empresas prefieren combinar jornadas presenciales con teletrabajo, en lugar de permitir el trabajo 100% remoto.
¿Por qué vuelve a crecer el teletrabajo?
Hay varios factores detrás de este repunte:
- Mayor demanda de los empleados: Muchas personas han descubierto las ventajas del teletrabajo y buscan empleos que les permitan mayor flexibilidad.
- Mejoras tecnológicas: Herramientas como videollamadas, software de gestión y plataformas en la nube han hecho que trabajar desde casa sea cada vez más eficiente.
- Cambio de mentalidad en las empresas: Aunque algunas siguen apostando por el modelo tradicional, muchas han comprendido que el teletrabajo no significa menor productividad.
- Costes para las empresas: Algunas compañías han visto que permitir el trabajo remoto les ahorra gastos en oficinas y suministros.
Las dificultades del teletrabajo en España
A pesar de los avances, el teletrabajo en España sigue enfrentándose a varios obstáculos:
- No todos los sectores pueden aplicarlo. Mientras que en tecnología, marketing o finanzas es fácil teletrabajar, en sectores como la hostelería, la educación o la sanidad es prácticamente imposible.
- La legislación sigue siendo un reto. Las leyes actuales establecen que si un empleado trabaja más del 30% de su jornada desde casa, la empresa debe cubrir parte de los gastos. Esto ha llevado a que algunas compañías prefieran limitar el teletrabajo.
- Dificultades para separar vida personal y profesional. No todo el mundo tiene un espacio adecuado en casa para trabajar, y la falta de contacto con los compañeros puede afectar al bienestar emocional.
¿Qué pasará en el futuro?
Aunque es difícil hacer predicciones exactas, todo apunta a que el teletrabajo seguirá formando parte del panorama laboral, pero sin ser la norma.
Las empresas seguirán apostando por modelos híbridos, permitiendo a sus empleados trabajar desde casa algunos días a la semana. Además, la digitalización y la llegada de la inteligencia artificial podrían facilitar aún más esta transición en muchos sectores.
Si estás buscando empleo y quieres teletrabajar, lo mejor es fijarte en empresas que ya ofrecen esta opción y asegurarte de que cuentan con políticas claras para el trabajo remoto.