Tal como están las cosas, la Jornada por el Trabajo Decente que se celebra cada año en 7 de octubre adquiere mayor relevancia este año.
Con una gran tasa de paro, España ocupa ya el primer puesto de parados de la UE y no se auguran mejores resultados para lo que va de año. Los entendidos: patronal, empresas de Recursos Humanos y políticos sí ven un pequeño aumento en la economía para mediados de 2010.
Así, hoy millones de trabajadores se movilizan en todo el mundo por esta importante jornada, organizada por la Confederación Sindical Internacional (CSI), que cuenta con 170 millones de afiliados de 120 países del mundo, entre ellos los sindicatos españoles CC.OO. y UGT.
Se realizarán manifestaciones, concentraciones, asambleas y lecturas de manifiestos en las empresas en todas las ciudades españolas para exigir políticas que diginifiquen el trabajo y creen empleo, pues es un derecho para todas las personas.
Los sindicatos van a reclamar medidas especiales, como es la frenada a los despidos colectivos, más seguridad y conciliación laboral e igualdad entre trabajadores. Además, pedirán una iniciativa decidida de políticas públicas para reactivar la economía.
Para los sindicatos ésta es una jornada para luchar, reivindicar, pedir y reclamar las medidas que no se están obteniendo. Por ejemplo, para USO, el Trabajo Decente implica garantizar la creación de empleo estable y con derechos, proporcionar redes de protección social para las personas que carecen de empleo y recursos, y posibilitar mediante el diálogo que los trabajadores tengan unos ingresos adecuados que les permitan llevar una vida digna, entre otras muchas propuestas.