Durante el pasado año, tan sólo un 2% de los trabajadores obtuvieron un empleo a causa de la intermediación recibida por el Servicio Público de Empleo Estatal.
De hecho, esta cifra lleva varios años sin obtener importantes variaciones, algo que demuestra que su escaso nivel de intermediación no se debe, en este caso, a las consecuencias creadas por la pandemia de Covid-19.
La tasa de intermediación se mantiene igual que en 2019
Tal y como refleja el Instituto Nacional de Estadística por medio de la Encuesta de Población Activa, esta cifra del 2% respecto a la tasa de intermediación, es exactamente la misma que publicó el SEPE en el año 2019, antes de la llegada de la pandemia.
La cifra total de personas que obtuvieron un puesto de trabajo por la intermediación realizada en una oficina pública de empleo, es de 316.600 personas durante el 2020. Además, cabe destacar que a partir de ahora Hacienda va a permitir el pago en 6 meses del IRPF a todos aquellos que estuvieron bajo un Expediente de Regulación de Empleo en el pasado año.
Se trata de una cifra que nada tiene que ver con el nivel de intermediación que se ha registrado por parte de las Empresas de Trabajo Temporal, en las cuales el porcentaje conseguido en 2020 es de un 3,5%, lo que equivale a un punto y medio por encima del nivel de intermediación del que dispone el SEPE.
Por lo tanto, la cantidad de personas que consiguieron un puesto de trabajo durante el año pasado, a causa de la intermediación recibida por una ETT, ha sido de un total de 561.000 trabajadores. Es importante también destacar que este porcentaje se ha visto reducido en comparación con la cifra obtenida en 2019, concretamente hablamos de una caída de 6 décimas.
Antes de la llegada de la pandemia de Covid-19, el porcentaje de intermediación llevado a cabo por las Empresas de Trabajo Temporal, fue de un 4,1% de asalariados.
Volviendo a los datos obtenidos por medio de la Encuesta de Población Activa en 2020, se llega también a una importante conclusión; y es que la mayoría de los trabajadores en nuestro país dispone de un jefe a su cargo, pero de ningún subordinado. Sobre esto, 7 de cada 10 hombres se encontraban en esta situación durante el pasado año.
En lo que respecta a la cifra total de trabajadores ocupados durante 2020, un 10,1% no disponía de jefes ni tampoco de subordinados, un 6,2% era encargado, otro 6,4% dirigía una empresa pequeña, así como un departamento o una sucursal, mientras que un 7,2% era mando intermedio y tan sólo un 0,5% dirigía una empresa mediana o grande.
Sobre la cantidad de empleados que disponen de jefe, pero no de subordinados, ésta llegó a disminuir 7 décimas en comparación al año pre pandemia. Por el contrario, el porcentaje de mandos intermedios experimentó un aumento de una décima. El que sin duda mayor aumento obtuvo durante el 2020 fue el porcentaje de ocupados independientes que aumentó 7 décimas.