A pesar de los esfuerzos para frenar el impacto del coronavirus en las cifras de empleo, las previsiones sobre destrucción de empleo en 2020 son francamente malas.
A lo largo del primer trimestre del año, se constató una cifra de desempleados del 0,4%. Por su parte, la tasa de paro fue 3 décimas inferior a la misma del año anterior por las mismas fechas. Estos datos, que parecen surrealistas a causa de la severa crisis económica que se ha dado desde que el Covid-19 llegó a nuestro país, tienen su lógica en que los trabajadores que han sufrido un ERTE no se toman en cuenta como desempleados en los datos oficiales, sino como ocupados.
Afiliaciones a la Seguridad Social y previsiones
Respecto a las afiliaciones a la Seguridad Social, estas sufrieron una bajada brutal en tan sólo más de una semana, perdiendo alrededor de un millón de afiliados entre el 13 y el 31 de marzo, justo cuando el virus comenzaba a extenderse y el Gobierno declaraba el estado de alarma.
A pesar de que la situación parece comenzar a aliviarse en el comienzo de este segundo trimestre, no hay que dejar pasar que también durante este último mes de abril, los trabajadores que han sufrido ERTE ya se sitúan en un total de 3,3 millones. Una cifra que sin duda, no deja indiferente a nadie.
Los expertos estiman que a lo largo del año, el empleo relacionado con puestos de trabajo a tiempo completo, se reducirá hasta un 7,6%, aunque a lo largo del año siguiente se recuperará en un 4,4%, por lo que no todo son malas noticias.
Cabe destacar que, por medio de las previsiones realizadas respecto al PIB, se obtiene la previsión implícita del crecimiento de la productividad y de los costes laborales unitarios. En este mismo orden, las cifras disminuyen un 1,9% durante este año, aunque durante el siguiente experimentará un crecimiento del 1,7%. En cuanto a las CLU, estas van a sufrir un caso contrario, es decir, un aumento del 3,2% en 2020 y una bajada en el año siguiente equivalente a un 1,9%. También se calcula que la tasa de paro media anual aumentará hasta el 20,2%, aunque durante el año siguiente las cifras se recuperarán, disminuyendo un 17,9%.
Desde luego, los ERTE durante la pandemia del Covid-19 están siendo el gran protagonista del año. Si se considerasen como desempleados todos los millones de trabajadores afectados por ellos, la tasa de paro se elevaría hasta el 34%.
A falta de datos sobre este mes de mayo, que conoceremos en unos días, los del último mes del primer trimestre, abril, no arrojan mucha positividad a toda esta difícil situación. No son pocos los expertos que comparan estas cifras con las de la temida crisis del 2008, aunque desde luego no se han dado en las mismas condiciones ni de la misma manera, por lo que se espera que la recuperación sea bastante más rápida.
En cuanto a los niveles de desempleo por sectores, los más afectados han sido los de educación y comercio al por menor. Otra de las grandes víctimas de la crisis económica por el Covid-19, han sido los autónomos, cuyos datos de afiliación han caído en 41.250 personas en abril, datos que no se veían en los últimos 37 años en la historia económica de España.