La desconfianza y el pesimismo frente al trabajo y la economía vuelve a ser la tónica dominante entre los empresarios. Así lo indica el Índice de Optimismo Empresarial (Business Optimism Index) de Grant Thornton que sitúa en 58,4 puntos en el mes de agosto, lo que supone diez puntos por debajo del nivel alcanzado en el mes de julio.
Así, las empresas de Estados Unidos han dejado los llamados «brotes verdes» a un lado para pasar a épocas algo menos deslumbrantes. Se reconoce que una mayoría de los empresarios pospone la consolidación de la recuperación económica a 2011, algo que en 2010 ya se había planteado como que podía ocurrir.
Del estudio se desprende también que los empresarios no ampliarán sus plantillas en lo que queda de año, pues meses anteriores sí se hablaba de una cierta ilusión por dar más empleo a trabajadores y asignar nuevas tareas. Ello se ha visto reducir nuevamente.
El empleo y la economía es Estados Unidos es actualmente una montaña rusa que llena de inestabilidad el país y, como consecuencia, los empresarios ven reducidas sus expectativas en crecimiento. Sólo un 38% de los encuestados ve positivo aumentar sus plantillas.
En Estados Unidos hay un nivel de estancamiento de la economía importante, debido también a la especulación inmobiliaria. Los creadores del estudio confirman una «creciente preocupación» entre los directivos de las empresas porque ven que la economía no acaba de despegar.
Lo curioso es que este mismo estudio realizado a los empresarios del Reino Unido ha obtenido resultados similares, pues la confianza de los empresarios británicos también se ha visto relantizada. ¿Vivirán ambos países una situación de crisis como se da en algunos otros países de la UE?