Sí, no es una frase muy positiva para empezar el año, pero es realista. Y es que según el Euroíndice laboral IESE, en marzo del próximo año España sumarán casi 4,5 millones de parados, cifra no registrada nunca antes en España.
Todo ello hace presagiar que lo establecido en la Cumbre de Lisboa de 2000 no se va a cumplir, pues se quería perseguir el objetivo de que la UE pretendía convertirse en la Unión en el “espacio económico más dinámico del mundo”. Entre otras cosas, se constataba la necesidad de incrementar la proporción de personas ocupadas dentro de la población total.
En términos concretos, se determinó un objetivo de tasa de empleo (proporción de ocupados en la población de entre 15 y 65 años de edad) de un 70% para inicios de 2010. Las previsiones anteriores conllevan el fracaso de España, Italia, Francia y Polonia en la consecución del objetivo de empleo.
Y es que por tercer trimestre consecutivo, todos los países incluidos en este trabajo recortarán puestos de trabajo, con excepción de Polonia, en donde se creará un número de empleos insignificante.
Así, la tasa de empleo española en marzo próximo será de un 60,7% (9,3 puntos porcentuales menos de lo necesario para cumplir el objetivo). Si comparamos con otros países de la UE, Francia será de un 64,5% (5,5 puntos porcentuales por debajo de la meta) y la italiana alcanzará un 59,9% (10,1 puntos porcentuales menos que el objetivo).
Durante el primer trimestre de 2010, España, Alemania, Francia, Polonia y Reino Unido presentarán incrementos interanuales en sus respectivas tasas de paro juvenil más significativos que los que se observarán en el caso de los adultos. Lo contrario sucederá en Italia y Portugal, con la salvedad de que el primero de estos países logrará una reducción en el desempleo juvenil.
Los jóvenes seguirán ocupando tasas de paro muy altas, siendo uno de los colectivos más desfavorecidos por la crisis. Ante estos datos, nos nos rendiremos este año tampoco y queremos empezar un 2010 con un hilo de esperanza. Desde aquí animamos a todos a emprender, buscar, preparse, formarse y estudiar para sortear como sea los tiempos difíciles.