El impulso de la creación de empleos «verdes» o relacionados con el medio ambiente y la sostenibilidad, así como los empleos «azules» o relacionados con las nuevas tecnologías serán los objetivos del Gobierno español durante su presidencia en la UE, que empieza en enero de 2010.
En este cargo de turno, por el que van pasando todos los países pertenecientes a la UE, España debe mostrar salidas para la creación de empleo en toda Europa. También tendrán especial interés los de atención social o «empleos blancos».
Así, miembros del Gobierno establecen centrarán sus esfuerzos en desarrollar políticas activas de empleo contra la crisis, en la prevención y el tratamiento del paro, en poner en marcha reformas en el mercado de trabajo y en fortalecer la protección social.
Ello se hará en el marco de la llamada Estrategia Post 2010, más conocida como Estrategia de Lisboa. El ministro de Trabajo remarca que esta estrategia deberá seguir fijándose como objetivos la promoción de nuevos nichos de empleo como los ya mencionados, la adecuación de las cualificaciones a las demandas del mercado laboral.
La participación de los jóvenes en el mercado laboral, el fomento del empleo autónomo y la mejora del funcionamiento y eficacia de los servicios nacionales de empleo, entre otros, son otras de las medidas que han de tenerse en cuenta porque es una prioridad de diversos colectivos que no pueden encontrarse más tiempos en tales situaciones.
En materia de cohesión social el objetivo de la Presidencia española será el de consolidar los sistemas de protección social a medio y largo plazo y favorecer la igualdad de género en el empleo.
En estos tiempos tan díficiles, especialmente para España, la Presidencia española deberá ser y será un punto de referencia importante que continúe la tradición de los gobiernos socialistas españoles en su europeísmo, en pos de una UE mucho más eficiente, cercana y capaz de jugar un papel de primer orden en el concierto mundial, ha establecido el Gobierno.