La situación actual en el panorama laboral también se ha visto repercutida en los incrementos salariales, que han subido un 1,7% menos de lo previsto. En concreto, han subido un 2,5% en el año 2009, una cifra que supone mucho menos del 4,2% fijado a finales de 2008.
Pero con la crisis y la economía en la cuerda floja es algo que ya no nos sorprende a nadie. Los trabajadores pagan el pato y las empresas se han visto obligadas a corregir a la baja sus previsiones de incremento en casi dos puntos.
Esta situación es grave porque por primera vez en los últimos cinco años, el incremento salarial de España es inferior al promedio del resto de países de Europa Occidental, con un diferencial de menos del 0,1% en 2009 respecto al 0,6% más de 2008.
Estas medidas tienen en cuenta las recomendaciones al respecto elaboradas por el Foro de Gobierno Corporativo europeo, así como el reciente acuerdo de los ministros de Economía del G-20 para limitar las bonificaciones que reciben los directivos.
Todas esto hará que las cosas vayan mejor y la economía se estabilice. Si comparamos la subida salarial de España con otros países de la UE, vemos que los mayores incrementos han sido Bélgica, Grecia y Austria con un 3,7%, un 3,4% y un 31%, respectivamente.
A la contra están Suiza, Luxemburgo, Dinamarca y Alemania, con menos incrementos salariales, con un 1,9%, un 2,1% y un 2,2%, respectivamente. Los datos ratifican que nuestro país sigue sin levantar cabeza.