En estos días que tanto se habla del paro y sus altibajos, muchos os preguntareis qué es esto de la Encuesta de Población Activa (más conocida como EPA) y por qué difiere en sus resultados de los datos del INEM.
La EPA es una investigación realizada por el INE (Instituto Nacional de Estadística) desde 1964 y que se lleva a cabo con una periodicidad trimestral. Su objetivo es obtener datos sobre el mercado laboral y su evolución, teniendo en cuanta variables como el número de parados y ocupados o el porcentaje de actividad. Para la encuesta se toma una muestra inicial de 65.000 familias al trimestre, que en la práctica queda reducida a aproximadamente 60.000 familias entrevistadas de manera efectiva; lo que equivale a 180.000 personas.
Las entrevistas se reparten a lo largo de las 13 semanas del trimestre. Por tanto, los encuestados deben responder basándose en la situación laboral que tenían en la semana inmediatamente anterior a la de ser encuestados. Tras encuestar a los 60.000 familias, los resultados de la EPA se publican el penúltimo o el último viernes del mes siguiente al trimestre considerado.
Las familias encuestadas están obligadas a dar la información solicitada de forma veraz, exacta, completa y dentro del plazo a los servicios estadísticos. Por eso, hay unas sanciones fijadas entre 60 y 30.000 € por el incumplimiento de esta obligación.
Si todas las personas de 16 o más años de una vivienda se niegan a colaborar en la primera entrevista, la vivienda se sustituirá por otra cuyos componentes acepten ser entrevistados. En cambio, si la negativa se produce en la segunda y sucesivas entrevistas, no se sustituirá la vivienda, y se repetirán los contactos en los trimestres posteriores por si el grupo humano aceptara volver a contestar
A fin de evitar el cansancio de las familias, el 17% de las mismas son renovadas cada trimestre. Es decir, cada familia permanece en la muestra durante un año y medio antes de ser sustituido por otra.
Todos los países de la Unión Europea están obligados a hacer al menos una encuesta de población activa cada año, y para poder comparar los datos de un estado con el de otro de una manera veraz, la Comisión Europea exige uniformidad en los procedimientos de recogida y tratamiento de los datos. A su vez, esta legislación cumple los requisitos exigidos por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en la materia.
Diferente al dato del INEM
La otra manera de obtener datos sobre el paro es fijarse en el número de personas registradas en el INEM. La diferencia en los datos de desempleo que arrojan ambos métodos puede llegar a ser abismal, de todas maneras, mediante la EPA se obtienen muchos más datos sobre el mercado laboral. Con lo cual, aunque ambos métodos están aceptados para calcular la tasa de paro, ninguno de los dos es 100% fiable: es muy posible que haya gente que aunque esté parada y/o buscando trabajo no esté apuntada en el INEM o que haya gente que está trabajado en el mercado negro y aun así sigue apuntada en el INEM.