Seis de cada diez mujeres renuncian a su carrera profesional para ser madres

Sólo el 6% de los hombres antepone la paternidad a su dedicación laboral.

La tristemente conocida brecha que separa a hombres y mujeres en el mercado laboral, entre otros ámbitos, tiene numerosas derivadas: la diferencia entre los salarios de unos y otras, la discriminación al contratar por parte de las empresas o una tasa de paro femenina disparada respecto a la masculina, que deja una mayor incidencia en el desempleo entre ellas, por citar algunos de los aspectos más notorios.

El precio de la maternidad

De forma más genérica, el 58,1% de las mujeres renuncia a su carrera profesional al ser madre, frente a un escaso 6,2% de los hombres, según el estudio sobre conciliación titulado Somos equipo, elaborado por la asociación Yo No Renuncio, creada, a su vez, por el Club de Malasmadres.mujerestrabajoPara más inri, la crisis que comenzó allá por 2007 y que aún sigue oscureciendo la vida de muchas personas, no ha hecho sino agravar la situación laboral de las mujeres, dejando en un segundo plano el talento o el empeño por trabajar.

Barreras para la mujer

El estudio, cuyas conclusiones se han obtenido a partir de una encuesta on line a 24.000 personas mayores de 21 años, destaca que esta descompensación se debe a “la presencia de barreras internas compuestas por factores individuales, como valores y creencias, y factores relacionales de pareja; así como también a barreras externas, institucionales y empresariales, como los permisos por maternidad y paternidad o beneficios en el mercado de trabajo”.5 consejos para encontrar trabajo en 2016Incluso cuando las mujeres todavía no han tenido hijos ya creen que serán ellas las que van a tomar decisiones relacionadas con la renuncia de algún tipo a su vida profesional. Hasta un 51,3% lo considera así, mientras únicamente el 11% de los hombres se plantea una elección similar.

Renunciar antes, incluso, de ser madre

La emprendedora Sheryl Sandberg, en su libro Lean in (Vayamos adelante, en su traducción al castellano), resume este patrón de conducta en la frase “no te vayas antes de irte”, alertando de que, si ellas toman decisiones de renuncia antes de tener hijos, acabarán por retrasar sus carreras profesionales y, por tanto, revertir la penalización de la mujer en el mercado laboral se complica.

La brecha existe también en el hogar

Por otra parte, el 54% de las mujeres encuestadas ha declarado “ser la principal responsable de las tareas invisibles y no cuantificables del hogar”, frente al 17% de los hombres. Así, según la investigación, las mujeres “están pendientes de los requerimientos del colegio en un 72% de los casos, del seguimiento médico de los hijos en un 67%, de poner lavadoras un 66% de las veces y de preparar la lista de la compra un 59%».

“No podemos conseguir que en las empresas y en la sociedad se entienda la conciliación si antes no se entiende en casa”, asegura la presidente de Yo No Renuncio, Laura Baena. “Aunque hay empresas que quieren equiparar puestos directivos entre hombres y mujeres, hay mujeres que no cogen esos puestos porque, si no tienen una pareja corresponsable en el hogar, no pueden asumir esas responsabilidades”, añade.

A mismo sueldo, más tareas en casa para las mujeres

¿Qué sucede cuando tanto unos como otras aportan al hogar por igual en términos de salario? Según la encuesta citada, el 45,2% de las mujeres que pone la misma cantidad de dinero a la economía familiar que sus parejas declara “ser la principal responsable de las tareas doméstico-familiares”, mientras que sólo «en el 9% de los casos son sus parejas las principales responsables de estas tareas” y en el 36% “se gestionan de forma equilibrada”.

Es más, incluso en aquellas familias en las que la mujer aporta mayores ingresos al hogar, son ellas las principales responsables en mayor medida en todos los casos (44,7%, respecto al 10% de sus parejas).

Igualar los permisos de maternidad y paternidad

Tal y como se destaca en el estudio, “es necesario actuar sobre la educación y concienciación de la sociedad, cambiar los permisos de maternidad y paternidad por unos iguales e intransferibles, redefinir las jornadas laborales y flexibilizar el trabajo remunerado para que éste deje espacio a otros usos del tiempo”.paro femenino«La corresponsabilidad está lejos de ser una realidad en los hogares españoles, los partidos políticos con los que nos hemos reunido nos han dejado claro que los permisos iguales e intransferibles no llegarán España ni en esta década ni en la siguiente“, remarca Laura Baena.

Las mejoras, sobre todo en el ámbito público

«Con la entrada de la mujer en el mercado laboral, podríamos esperar que la desigualdad entre hombres y mujeres llegara a su fin, pero lo cierto es que después de varias décadas viviendo este cambio en la esfera pública, no se observan mejoras en el ámbito privado y siguen siendo ellas las principales encargadas de las tareas del hogar», se remata en la encuesta Somos equipo, llevada a cabo por la asociación Yo no renuncio.

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.