Tal como está el panorama laboral actualmente en nuestro país, seguramente son muchos los españoles que pedirán a los Reyes Magos un trabajo sólido y estable para 2010.
Profundizando un poco más y, según un reciente estudio de una consultora de RR.HH., casi la mitad de los trabajadores asegura que pediría un cambio de trabajo. Viendo como está la cosa, el que tenga un trabajo continuado puede ahora darse por satisfecho.
Todo ello viene dado no sólo por razones económicas, sino por ambiente laboral, el realizar más horas, la presión de los resultados, los despidos, y diferentes virajes estratégicos que puedan estar dando las compañías para afrontar la crisis.
De todas maneras, los trabajadores son conscientes de la situación de crisis que todavía sobrevuela el país y la mayoría de los encuestados se muestran preocupados por mantener sus puestos de trabajo y de hecho muchos serían capaces de solicitar un cambio de destino, soportar un año más la congelación salarial o rechazar una baja voluntaria incentivada, antes de perder su empleo.
En cifras, un 59,7% de los encuestados asegura que antes de correr este riesgo pediría a su empresa un traslado geográfico, frente al 20,4% que dice que no lo haría y el 20,4% que no sabe o no
contesta.
Otros regalos que normalmente pedíamos a los Reyes era la subida de sueldo. Este concepto ha pasado a mejor vida este año y los trabajadores ya no se lo plantean, pues saben que sus empresas no subirán el sueldo durante el 2010.
Si bien cobra fuerza el ascenso profesional, que es elegida como la mejor recompensa por el 18,3% de los trabajadores, frente al 10,6% de un año antes. La flexibilidad horaria sería el tercer regalo más solicitado (elegido por un 21,8%, frente al 19,9% de 2008), mientras que la formación se ha estancado con un 15,3%, posiblemente por los recortes que pueda estar habiendo dentro de las compañías con motivo de la crisis.
¿Y tú que pides esta Navidad en tu empresa?