El teletrabajo cuenta con pros y contras tanto para la empresa como para el empleado; te contamos ambos.
Las tecnologías de la información y de la comunicación (TIC) han cambiado el mercado laboral de forma drástica, siguen haciéndolo y más aún que lo harán. Esa imagen que se asocia más al blanco y negro de trabajar toda la vida para una empresa, con el mismo horario, en idéntico lugar y sin apenas usar la tecnología ha pasado a mejor vida. Aunque como en cualquier esfera de la vida, pueda haber excepciones.
En ese contexto se ha consolidado una fórmula laboral: el teletrabajo. Las cifras son elocuentes en este ámbito, dado que, mientras en 2005 había 808.000 personas que trabajaban desde su hogar -aunque fuese de forma ocasional-, la estadística presente ya roza el millón y medio de personas teletrabajando. En concreto, la cifra es de 1,43 millones, el equivalente al 7,4% del total de ocupados en España, cinco décimas más que doce meses antes, según datos de Adecco.
Además, a pesar de que por el momento son poco más de 1 de cada 14 ocupados el que teletrabaja, desde la consultora aseguran que la tendencia se encuentra al alza. Esa afirmación se apoya, entre otros factores, en que de los cerca de 950.000 empleos creados en los últimos dos años, el 25% se trataba de teletrabajadores. Es decir, que la figura del freelance resulta cada vez más frecuente.
Qué necesitas para trabajar desde casa
Aunque el teletrabajo no sirve para todas las ocupaciones, puesto que algunas implican la presencia física del empleado, sí puede aplicarse a muchas profesiones. Así que, a pesar de que parezca una obviedad, lo primero que necesitas es dedicarte a una actividad que permita trabajar desde casa o de forma remota desde cualquier otro lugar que no sea una oficina. Por ejemplo, la arquitectura técnica, el marketing, la informática o el periodismo.
Sin embargo, no son las únicas, siendo el teletrabajo una fórmula que se va extendiendo como la pólvora. De hecho, hay que distinguir grados dentro de esta manera de trabajar, ya que no es lo mismo ser teletrabajador a tiempo parcial que a jornada completa. En otras palabras, algunas compañías usan el teletrabajo para facilitar la conciliación de la vida laboral con la personal de sus asalariados, por ejemplo, permitiendo que durante la mañana se trabaje en la oficina y, a la tarde, desde casa. En cambio, hay profesionales que apenas necesitan reunirse con otras personas o tener contacto cara a cara con jefes, compañeros o clientes, porque cuentan con la autonomía suficiente para desarrollar su labor profesional desde cualquier lugar.
Ahí es donde aparece la importancia del mundo digital, dado que el auge del teletrabajo no sería posible sin el papel relevante que juegan en él las nuevas tecnologías. Son ellas las que posibilitan que el empleado se mantenga en contacto con el exterior, recibiendo encargos o enviándolos completados, recepcionando instrucciones o mandando facturas. Internet, el correo electrónico, diversas aplicaciones y el móvil permiten esa autonomía al teletrabajador. Incluso las redes sociales, tan prácticas para buscar trabajo, son útiles en ese sentido.
Además de una profesión permeable al teletrabajo y de los medios tecnológicos necesarios, también es necesario contar con una red de contactos y una experiencia suficientes como para poder usar esa fórmula laboral.
Ventajas de trabajar desde casa
¿Cuántos trabajadores presenciales no han deseado alguna vez quedarse en casa cumpliendo con sus tareas, por ejemplo, en un frío día de invierno en el que no apetece nada salir a la calle? Ciertamente, el teletrabajo cuenta con varios puntos a favor:
- Nada como la comodidad del hogar, te sentirás mucho más a gusto trabajando en un lugar que consideras propio.
- Cuentas con mayor autonomía para desarrollar tu trabajo.
- Puedes organizar tus horarios como más te convenga, no te ves forzado a estar sentado en una silla ocho horas seguidas.
- Si dejas un puesto en una oficina para empezar a trabajar en casa, te darás cuenta de lo que ganas en libertad personal.
- El teletrabajo puede ser un puente hacia el emprendimiento.
- La conciliación de la vida profesional con la privada gana muchos enteros gracias al teletrabajo, en especial si tienes hijos y, más aún, si éstos todavía son pequeños. Esa sensación de pasarte el día en la oficina sin ver a tu familia -que a tantas personas fastidia-, puede verse atenuada o eliminada mediante esta fórmula laboral.
- A muchas personas les trastorna comer cada día lectivo fuera de casa. Si eres de los que cuida la dieta, resulta más sencillo comer sano, variado y equilibrado trabajando en casa.
- Lo mismo sucede con la actividad deportiva: si te organizas bien, puedes salir a correr o ir al gimnasio a media mañana en vez de a la noche, como hacen muchas personas porque no tienen otra opción por la rigidez de su horario de oficina.
- No tienes a tu jefe continuamente evaluando lo que haces.
- Si necesitas ayuda en alguna tarea, puedes invitar a un amigo a tu casa a que te eche una mano.
- Con el teletrabajo ahorras tanto tiempo como dinero por no hacer desplazamientos.
- Como derivada del punto anterior, evitas el tráfico, los atascos se acaban para ti.
- En general, el estrés se reduce gracias al teletrabajo.
- El teletrabajo es una gran herramienta para las personas con dificultades de movilidad, puesto que les permite una mayor inserción laboral.
Desventajas de trabajar desde casa
Sin embargo, a pesar de que, de entrada, todo parecen ventajas, el teletrabajo también presenta inconvenientes.
- Es difícil generar un corte, una distinción, entre el trabajo y la vida en tu hogar, por lo que debes aprender a separar ambos mundos y no vivir atado al ordenador. (Aquí te mostramos cómo desconectar del trabajo en vacaciones).
- No te relacionas con gente más allá de las conexiones virtuales, con los peligros de falta de socialización que ello conlleva. El vínculo que se genera con los compañeros de trabajo, así como los contactos -que siguen siendo claves para encontrar trabajo– que puedes generar, son importantes. Asimismo, la relación con tus empleadores, por más complicada que pueda ser, también te deja muchas enseñanzas.
- Estar todo el día encerrado en tu casa puede deprimirte un poco y aislarte del exterior. Debes evitar estar en pijama durante toda la jornada y pasarte varios días encerrado. Lo ideal es salir de tanto en cuanto a tomar aire.
- Seguramente harás varias visitas a la nevera: existe un evidente riesgo de sedentarismo en el teletrabajo. Procura no comer de más sólo porque tienes la cocina cerca o fumar todo lo que quieres porque nadie te lo impide.
- El deporte puede ser el gran aliado del teletrabajador.
- Puede resultar complicado organizarse y acabar trabajando de noche, con el sueño cambiado o durante los fines de semana porque no has cumplido de lunes a viernes. Lo recomendable es establecer horarios y cumplirlos. De no hacerlo, la desconexión con el mundo real será mayor.
- Cuando trabajas a distancia no se suele cobrar con la misma fluidez que cuando se es asalariado. Procura hacer un seguimiento de los cobros y agilizarlos al máximo.
Ventajas para las empresas del teletrabajo
También puede parecer que el teletrabajo únicamente beneficia al empleado, pero no es así. Si la empresa lo sabe gestionar, puede igualmente sacar partido de esta fórmula laboral. Aquí te damos algunas claves en ese sentido:
- Una de las grandes preocupaciones del empresario que apuesta por el teletrabajo es la falta de control sobre lo que hacen sus asalariados. Para evitar que se produzca deben fijarse las metas de cada cual: trabajar por objetivos puede ser un sistema de control eficaz.
- Ahorro en alquiler de oficinas, en consumo de electricidad u otros suministros, en la posible instalación de comedores o en cualquier material o medio de trabajo que la empresa deba proporcionar al profesional para llevar a cabo su tarea.
- Diversos estudios indican que el teletrabajador es más productivo que el asalariado.
- En muy mal estado de salud tiene que estar un empleado para no trabajar en casa. Así que la empresa gana al recortar en absentismo laboral.
- La empresa podrá contratar a personas de cualquier parte sin importar la distancia.
- Esa facultad puede facilitar la expansión geográfica del negocio.
- Los roces o problemas de convivencia entre los compañeros desaparecen.
Desventajas para las empresas del teletrabajo
De la misma manera, existen contras para el negocio al valerse del teletrabajo, entre los cuales figuran los siguientes:
- Puede haber una pérdida en cuanto al desarrollo de trabajo en equipo.
- La motivación de los trabajadores a distancia resulta más complicada.
- Igualmente, al haber menos contacto presencial, se da una mayor dificultad en hacer que los empleados se sientan parte de la empresa.
- Puede darse una cierta pérdida de comunicación y de control entre la empresa y el trabajador, puesto que los medios que usan para interrelacionarse son el correo electrónico, el teléfono, etc.
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